
Ante la Tienda del Puntet había un castillo, sí, como lo oyes, un castillo con su foso, torres y murallas. No el castillo efímero que echamos de menos en este abril sin fiestas, sino una gran fortaleza, que después se convirtió en convento. Lo construyeron los señores de Alcoy en aquella colonización que creó la nueva villa y que quitó el poder sobre estas tierras a un noble musulmán, Al Azraq. Después de años, desterrado en Granada, regresó con unos jinetes benimerines en 1276 para intentar tomar la fortaleza de Alcoy y a sus puertas, alcanzado por una saeta, perdió la vida.
Años después, en 1304, hubo otro ataque musulmán, realizado por jinetes abasíes, que después de incendiar Cocentaina, intentaron tomar Alcoy. Tal vez fuera este el momento en el que surge la figura de San Jorge como patrón de la villa, haciéndose en 1317 voto perpetuo de honrarlo. San Jorge, un santo célebre en aquella época entre los caballeros cristianos, por la Leyenda Aurea, en la que se narraba cómo el santo rescató a una princesa de las garras de un malvado dragón en Libia.
El origen de las actuales fiestas de moros y cristianos de Alcoy se encuentra posiblemente en las “soldadescas” del siglo XVI, unos entrenamientos militares destinados a poder acudir a auxiliar a los pueblos de la costa cuando eran atacados por los piratas berberiscos. En un momento dado, estas milicias se suman a los actos en honor a San Jorge.
En el siglo XVII, en 1672, se tiene una primera noticia de la simulación de una lucha entre un batallón moro y otro cristiano. Será en el siglo XVIII cuando vaya desarrollándose la trilogía, como se denomina en Alcoy a sus tres días de fiesta, que se consolida en el siglo XIX, con un primer reglamento de la Fiesta datado en 1839.
Las fiestas de San Jorge de Alcoy son una suma de sensaciones y emociones que van desgranándose en tres intensos días, en los que la luz, el color, la música y la diversión, nos transforman, nos hacen viajar, olvidando las preocupaciones y los sinsentidos.
Igual que contar con palabras lo que sientes cuando te enamoras es casi imposible, es muy difícil poder hacerte vivir las experiencias mágicas que sientes en las calles de Alcoy, en sus días de fiestas de San Jorge, a través de unas líneas. Pero podemos hacer que revivas esos momentos únicos, esos instantes, que con la luz de abril quedan marcados en nuestra memoria, tal vez en la memoria del corazón que es la más inolvidable, llevándote a casa el sabor, el ambiente, de la fiesta alcoyana.

Si no eres alcoyano y no has tenido la suerte de poder venir a vivir estas fiestas te invitamos a que vengas a visitarnos pronto y otro año a vivirlas en las calles con nosotros, así entenderás lo que te cuento en este post de curiosidades y el origen de nuestras fiestas. Estás invitado.
Desde el mismo corazón de Alcoy, en uno de esos lugares donde en fiestas nos encontramos y disfrutamos de la amistad y la diversión, tienes la Tienda Del Puntet, que en este año te invita a que no dejes de vivir alguno de esos momentos llenos de placer, con tu bebida favorita, tu “picaeta”, mientras suena un pasodoble o una marcha mora, y sientes la luz de abril descubriendo el color de la primavera. Porque este año, más que nunca, debemos celebrar nuestras fiestas con los pocos seres queridos que podamos, entre nosotros, en nuestras casas. No dejemos de celebrar y recordemos que pronto volveremos a tener nuestras fiestas y saldremos a las calles a celebrar de nuevo que somos alcoyanos y que nos sentimos orgullosos de nuestras tradiciones y de nuestra cultura.
Todas las fotos están cedidas por el Ayuntamiento de Alcoy. Os dejamos el link al folleto de las fiestas por si lo necesitáis.